CURIOSIDADES

Ante la falta de partido este finde y para no dejar de darle vida al blog, inauguraremos la sección de curiosidades y cagadas guadalupanas. Me tomaré el atrevimiento de iniciarla yo pero claro está que quien quiera puede relatar, contar o recordar algo divertido, penoso, vergonzoso o glorioso de este querido equipo.

Empezaremos esta sección en la cual hay mucha tela para cortar con una de esas cagadas divertidas. Esto ocurrió el año pasado, Guada venía de perder con Escobar en Paternal y el ascenso se complicaba cada vez más. El rival de turno era Mitre B en su bonito estadio. El partido fue un trámite (para ellos) el equipo de Palermo fue una sombra todo el partido. El rival puso a los jugadores de más edad al principio para luego meter a los pibes pero estos longevos deportistas ya ganaban cómodos. Ni hablar cuando entró el piberío, Guada atónito, desconcertado y estos muchachos sobrando el partido y cagándonos a goles. Vale destacar que nos hemos tomado revancha este año pero esa, es arena de otro costal. Con un pleito más que liquidado este relato podría ser un resumen claro del partido nombrando sin fines de cagadas pero no, hay un jugador que se llevó todo el protagonismo. Corría el segundo tiempo la murga guadalupana no daba pie con bola y se produce una contra para Mitre medio confusa. En ese momento el rival pierde la pelota que queda bollando en nuestro campo y el Cóndor con un gran repliegue defensivo corre hacia ella. Quien escribe recuerda que estaba ubicado, en ese momento, en el banco de suplentes, juro que ante la velocidad de Balan en esa corrida antes de que llegara al balón alguien de los que tenía al lado llego a esbozar una felicitación pero esta quedó atragantada tras el desenlace final. Cuando la pelota se levantó un poco y dicho jugador parecía que iba a tomarla con sus manos, en vez de eso, le proporcionó al esférico un remate furioso con su pie derecho, Sí “metió un fulbazo apuntando hacia su propia portería”. Increíble pero real, esto en el banco despertó algunas tímidas risas y unas caras de “este muchacho no puede hacer esto”. El juez como corresponde levantó su mano y le indicó los merecidos dos minutos. Lo recuerdo como si fuera hoy, Balan saliendo cabizbajo a sabiendas de la reprimenda que se le venía. Pero ni bien sale de la cancha para cerrar esta anécdota se escucha con claridad la voz de Gabi que, leve sonrisa cómplice de por medio, le dice al Cóndor  : “ESTABA PARA PEGARLE EH  “.